Los pingüinos de Magallanes son de tamaño medio, y algunos ejemplares suelen medir entre 35 y 45 cm. de altura, y poseer un peso de alrededor de tres kg.
Las alas del pingüino patagónico son cortas y fuertes, por lo cual son inútiles para volar, y actúan como aletas propulsoras, que le permiten alcanzar velocidades de hasta 45 kilómetros por hora. Su natación también se ve favorecida por su esternón macizo, y fuertes músculos pectorales. Asimismo, la visión de esta especie está adaptada al medio acuático, por lo que en tierra sus ojos resultan hipermétropes.
La vida de los pingüinos de Magallanes se divide en dos partes cada año: una reproductiva, en que salen del mar y solo vuelven para alimentarse; y otra en la que no salen del agua para nada, llamado período pelágico.
La dieta del pingüino de Magallanes es amplia i incluye pequeños peces, aunque también se alimenta de calamares, pulpos y diversos crustáceos.
Uno de los métodos de pesca que emplea esta ave consiste en nadar en círculos concéntricos alrededor de la mancha de peces. De tal forma, cada círculo se va haciendo menor, hasta que después de varias vueltas se dirige a los peces, que se dispersan en todas direcciones mientras el pingüino los atrapa.
Reproducción : Estas aves son monógamas y anidan en colonias, ubicadas en sitios de la costa con suelos blandos donde puedan cavar sus nidos (también pueden anidar bajo arbustos u otras protecciones).
Las hembras de la especie ponen dos huevos durante el mes de octubre, los cuales tras 42 días de incubación se abren para dar vida a las nuevas crías. Estos pequeños pingüinos serán independientes entre febrero y marzo; mientras durante el mes de abril mudarán sus plumas para la migración.
Los depredadores más importantes del Pingüino de Magallanes son la foca leopardo, el petrel gigante y la orca. Huevos y pichones son depredados por varias especies de aves, como la gaviota parda o skúa, la gaviota cocinera, la gaviota austral y la paloma antártica. También animales terrestres como el zorro colorado, el armadillo y el zorrino aprovechan la distracción de los padres para hacerse de huevos o crías indefensas.
La actividad humana igualmente produce en forma indirecta la muerte anual de muchos pingüinos, ya sea por la pesca excesiva de especies con que se alimenta, y los derrames de petróleo que lo afectan mortalmente junto al resto de la avifauna.
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